A veces la realidad me asusta bastante. me refiero a la realidad global y al curso que los hechos llevan desde hace bastante tiempo y al estado que tienen sumido al mundo. Acabo de ver el documental "zeitgeist" recomendado por gonzalo, y ciertamente tiene mucha información que desconocía y mucha otra que ya manejaba. En mi vida he conocido algunas personas bien metidas en todas estas materias, Marcos, Leonardo, Juan Carlos, Luis, incluso Isaac y en fín... tambien Hector, a propósito de las trece lunas que es un movimiento más bello quizás. Lo que muchas veces me ha asustado de estos movimientos y algunas personas es lo fácil q es separarse del resto, del mundo en fin, de las personas ignorantes que somos todos y de lo sospechamente sectoriales que al igual que sus supuestos enemigos son estas organizaciones. Reconozco una cuota de cinismo en esta linea de pensamiento. Ada me hizo ver que mi modo de entender la palabra cinismo es particular, espero que se entienda. Es como desconfiar del mundo solo porque yo soy desconfiable, o desconfiar de los esfuerzos ajenos encontrarlos infantiles o ingenuos solo porque uno mismo no sería capaz de realizarlos, así como yo con el proyecto "manzana cultural" y varias otras cosas...
En verdad me dan susto estas causas y muchas otras, desde el ambientalismo a la relación de pareja (única). Supongo que esas menciones vaporizan cualquier duda sobre la causa de mi desconfianza y apuntan directamente al miedo al compromiso.
Alfredo Jaar decía que esto del arte es basicamente un acto de fe, tanto para el creador como para el espectador, testigo quisieramos, partícipe ya no nos atrevemos a soñar....
Es que es dificil, pero necesario, optar por UN camino. Y es bastante infantil plantearlo de ese modo, es como para justificar la no toma de decision. Como quien niega fidelidad a nada que no sea la propia duda, pregonar la inconformidad como estilo de vida y la suspicacia como regla. Yo mismo he considerado eso cínico antes, yo mismo soy cínico día tras día. Sin embargo eso no es más que una máscara, un escudo. Una máscara sobreotra máscara -imagen que disfrutas Cota- tengo miedo a la realidad, entonces planteo como imposible dar el salto a ella, me protejo del posible fracaso y las consecuencias de este en la autoimgen del exito que uno desearía guardar. (juro que hablo impersonalemente en estas lineas hahaha).
No debería autocyberflagelarme verbalmente, he dado algunos pequeños pasos, como optar por el vegetarianismo, o asumir la presidencia del cefa o inclusive y por pequeño que parezca darme a la escritura de estas lineas y las del resto de entradas que componen este blog. Alguna vez ansié dar un salto enorme hacia una vida de pareja formal o estable pero fue de un modo infantil que presagiaba el fracaso y para que hablar del daño emocional que me causó. Aún así ya he optado por cosas como las ya escritas y la más garnde opción, una que hay que reafirmar cada día, es el compromiso con el arte. no basta hacer cursos de dramaturgia o guión, ni leer mucho o asistir a seminarios, en fin no bastan los aspavientos, ni siqueira realizar pequeñas piezas en la humeda y tibia cueva de nuestras habitaciones a la tenue luz de una vela complice. No bastaría siquiera ser exitoso en ello, no bastaría editar mil veces estas y otras lineas para buscar la esencia latente en ellas. Vivir, y seguir viviendo es un compromiso que tácitamente tomamos día a día, noche a noche. Al levantarse, al comer estamos afirmandolo, cada minuto que continuamos respirando es la afirmación de la vida y de una postura que no siempre tenemos clara, o a la cual no siempre nos apegamos. Vivo en pos de algo? una meta, un ideal? yo mismo cumplo un montón de responsabilidades no tanto por lo comprometido que estoy con ellas, si no que simplemente porque me parecen cosas buenas y utiles. Mientras sigo esperando encontrar minutos para crear cada vez un poco más, para acicalarme incluso. El punto de todo esto es darle algún marco que otorgue coherencia a la vida, que sea un tránsito con destino y no un mero deambular.